José Félix Díaz Bermúdez
El mundo católico celebra con regocijo y fe crecientes uno de los acontecimientos más extraordinarios de la historia religiosa moderna como es la aparición de la Virgen María en la localidad de Cova da Iria, Fátima, Portugal, hecho que ocurrió el 13 de mayo de 1917, y posteriormente varias veces, y del cual se acaban de cumplir 107 años, en medio de un escenario convulso para la humanidad en estas horas difíciles de conflictos, guerras y tensiones nacionales, regionales y globales.
La destrucción en la «Gran Guerra«.
El misterio singular de su presencia entonces en una Europa en la cual se estaba desarrollando la: “Gran Guerra”, que había comenzado en el año de 1914 y que se prolongó por varios años con efectos sociales desastrosos, por un lado, y, por el otro, el surgimiento en 1917 en Rusia de la llamada: “Revolución de Octubre” que destruyó a la Rusia zarista para instaurar un régimen autoritario e invasor de otras naciones con sistemas distintos, revelaría ante los hombres la necesidad de una indispensable conversión que contribuyera a detener y superar los males presentes y futuros.
Jacinta, Francisco y Lucía.
En el mensaje de la Virgen a los tres pastorcitos, santos hoy: Jacinta, Lucía y Francisco -la segunda custodió por muchos años aquel testimonio excepcional-, se evidencia la preocupación de la Madre de Dios por el destino de la humanidad y, en particular, por el de Rusia, donde finalmente se impuso el totalitarismo comunista, el menosprecio a las libertades individuales, en avance militar y cultural sobre otras naciones, el surgimiento de un régimen que privilegió al Estado, sometió a la persona y censuró la religión.
Lenin, líder de la Revolución Bolchevique, Rusia Comunista.
El llamado de María expresado a los niños sobre Rusia indicaba lo siguiente: “Oren hijos Míos, oren por Rusia, aún no ha sido consagrada a Mi Corazón Inmaculado”. Entre las causas de tal petición se encontraba su tristeza por los males que se avecinaban y las negaciones que surgieron contenidas en aquella expresión y política de Lenin y sus seguidores que indicaba: “Toda idea religiosa, toda idea de Dios, es una abyección indescriptible de la especie más peligrosa, una epidemia de la especie más abominable”.
Persecución y destrucción de la religión católica por parte del comunismo.
La Rusia bolchevique y el comunismo en general, empezarían desde entonces a cuestionar y a perseguir a la religión católica, sus doctrinas y prácticas a favor de la libertad del individuo y las naciones.
La Virgen María expresa y multiplica un llamamiento de dulzura, de amor, de bien entre los hombres. Ella se ha revelado tantas veces en presencia de los peores males, en las circunstancias más difíciles, cuando grupos y sistemas en distintos lugares se han opuesto al dictado de Dios y al bien de sus hijos.
«El milagro del sol«, testimonios gráficos de la época.
Ciento siete años después de sus apariciones en un modesto pueblo portugués, primero ante niños inocentes y luego ante las multitudes sorprendidas que observaron atónitas su milagro celeste -70.000 personas que presenciaron tales hechos-, el mensaje de María sigue vigente, invita, reta al hombre en sus pensamientos y en sus actos a preguntarse sí su vida, sus intereses, sus obras, están acordes con el amor a Dios, con el amor al prójimo, con la dignidad, con el valor de la existencia humana.
Multitudes en Fátima, 1917.
María en Fátima, “la señora más brillante que el sol”, obró maravillas indecibles aquel 13 de octubre de 1917 cuando en el campo la lluvia cesó completamente y el sol apareció otra vez, secó la tierra, recorrió el espacio celeste cambiando de tamaño y lugar, se aproximó a la gente y se alejó de nuevo y volvió a su sitio original, todo de manera tan inexplicable y misteriosa que constituye un hecho extraordinario expuesto ante los ojos de la multitud ignorante y descreída tantas veces, y que al final comprendió la verdad del testimonio de los niños, la grandeza de Dios, de Jesús y de la madre del Señor, irremplazable y superior, abogada y protectora nuestra, mediadora sublime y efectiva, guía certera y transformadora del destino de todos.
Fotografía de los movimientos irregulares del sol, milagro mariano, 1917.
¿Cuál es la enseñanza de Fátima para la humanidad actual? Qué Dios está presente y se evidencia de maneras distintas contrariando los prejuicios, faltas y errores nuestros, amonestando y exigiendo el bien general, y así como entonces, por su sagrada voluntad, el sol se aproximó a la tierra, llegue ahora persuasiva y generosa, triunfante y compasiva, la palabra y las señales de María al corazón endurecido de los hombres.
Santuario de Fátima, Portugal, imagen actual.
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