Alba Luzardo, un Espíritu en Movimiento desde el Teatro

José Félix Díaz Bermúdez

Albita Luzardo es una mujer creativa, talentosa, con una interesante trayectoria como docente, escritora, actriz, directora, coach actoral, productora teatral venezolana. Nació en el Estado Zulia pero su actividad es principalmente en Caracas. Recuerda con afectos su ciudad, Maracaibo, pero al mismo tiempo, sus intereses culturales la han llevado a otras partes de Venezuela. Hablamos de sus experiencias, sus actuales proyectos entre ellos con la Fundación Espíritu en Movimiento en diversos colegios y escuelas especialmente en zonas populares de la zona metropolitana de Caracas.

Su vinculación con la educación ha sido muy profunda, desde su condición como maestra y su actividad como profesora de Lengua y Literatura pero su pasión y dedicación principal es lo artístico y nos dice:

«Soy titulada en teatro, pero siempre esa chispa artística, uno no puede escapar. No sabes si conoces esa película «El Secreto de Sus Ojos», es argentina, es muy buena y uno de sus protagonistas dice que: «nadie puede escapar de su pasión», y eso es cierto». «Siempre he estado ligada a la cultura», afirma. «En los colegios siempre he tenido buenos directivos, porque siempre mis ideas han sido tomadas en cuenta, y comencé a dar teatro en los colegios en los que fui docente, entonces los representantes me decían: «profe…, ¿por qué no abre una escuela de teatro para niños?».

Y concretó ese proyecto: «… abrí una escuela y se llama Peldaño Teatro Infantil, con sede en Guarenas, Estado Miranda, un centro de creación artística desde el montaje de la obra más de 30 o 40 niños se inscribieron desde Guarenas, Guatire, Araira, en todo Barlovento. En ese proyecto había música, canto, baile, contrataba el coreógrafo y entonces era un centro artístico donde los niños aprendieron a hacer las máscaras, todo, todo, todo eso… Representamos al Estado Miranda y ganamos 10 premios: mejor dirección, mejor actor, con niños y jóvenes, entre otros. Pero sabes qué me llamó la atención con eso, que ese quehacer creativo involucra a toda la familia, y la familia a la comunidad, y la comunidad toda a la sociedad. Eso es una cadena… El proyecto cultural se vuelve un proyecto social».

Albita ha representado como actriz una serie de obras importantes: «Sueño de Una Noche Verano» de Shakespeare , «La Boda» de Ibrahím Guerra», «La Venganza de Don Mendo», que es una obra  del Siglo de Oro del Teatro Español del autor Muñoz Seca, y otra importante también en el teatro venezolano: «Fango Negro, Teatro en el Autobús», tuve mucho éxito en el Festival de Teatro de Caracas», dirigidas por Daniel Uribe para el Centro de Directores de Nuevo Teatro.

Al conversar específicamente sobre el Teatro Infantil en Venezuela, Albita manifiesta que existe en la actualidad un vacío que llenar y que en el mismo le gusta trabajar: «… en las comunidades porque están muy desatendidas y manipuladas» y propone que: «…a la familia, las comunidades, al ciudadano, tiene que dársele otra visión».

Entre las obras de teatro que ha escrito recuerda con especial afecto: «Buscando a Belencita», obra de Navidad, cuya protagonista jugaba con las nubes y las estrellas y cayó en un país llamado Venezuela. La niña se le extravió a Dios y si no aparecía: «¿Quién va a llevar a los 3 Reyes Magos hacia el pesebre de Jesús?». En la trama surge una agradable y divertida relación entre Belencita y los niños de barrio; el duende: «Cacao», un personaje divertido y guapachoso, bailador de merengue y el hada: «Orquídea», «toda sifrina», una delicada que era la flor nacional. Al final, Belencita no se quiere ir porque se encontró con un país maravilloso, Venezuela. Otra obra infantil es preciso destacar: «Los Creadores Infinitos y el Famoso Cohete de Oscar Wilde», en en la cual Albita es autora y directora.

Nos refiere tres obras infantiles escritas por ella: «Oruguita tiene un sueño que contar», «Alfredito, ¿Quién te manda a ser poeta?», «Las aventuras de Rompecoco y Medamiedo», entre otras.

«Es muy fácil trabajar con los niños, creativamente aprendemos nosotros de los niños», señala esta directora y artista venezolana y apunta que los niños venezolanos destacan por: «su chispa, la alegría» recordando una frase de Picasso: «tardé 40 años para pintar como los niños». «Donde están los niños le quitan el protagonismo a todo el mundo», resalta Albita.

Le preguntamos sobre el rol del teatro para mejorar a la sociedad y a la familia, nos refirió el origen del mismo y como los griegos lo utilizaron para expresar: «lo que les incomodaba». «El teatro no está hecho para complacer a nadie, está hecho para mover», subrayando que a través del teatro se puede cambiar la civilidad, «nada que se aprende a través del juego se olvida» y también que en ese proceso: «los niños van a enseñar al papá y a la mamás». En este sentido uno de los proyectos de denomina: «El Teatro Forma y Transforma» cuyo objetivo es transformar a la sociedad por medio del teatro escolar. Igualmente una de las ideas es desarrollar el Festival Anual Intercolegial y las Becas Soñar es Posible.

Otro aspecto significativo en nuestra conversación se refiere el acoso escolar o bullying, en inglés, y también el tema de la imposición de ciertos cánones que representan una distorsión de los valores de la vida. «El que es pequeño, el que no tiene la belleza impuesta por los cánones… ¿Quién dice que eso es bello?, todo eso lo llevan en la escuela. «Siempre hay un rechazo, siempre hay una burla pero hay que integrarlos»; «no hay nadie raro», «el racismo, la xenofobia, la homofobia, no deberían existir», indica expresando sentido amplio y transformador que se pueden alcanzar a través de este del arte en la sociedad. «El teatro no va a cambiar la situación, cambia a la persona que va a cambiar la situación».

Conversamos, finalmente, sobre su actividad de la obra que realiza la Fundación Espíritu en Movimiento, dirigida por destacada jurista y filántropa Maritza Mészáros, y ratifica su concepto de que el teatro es una formidable herramienta para el cambio social. Con ese objetivo, Albita y Maritza Mészáros se encargan de proponer los proyectos en las escuelas y al obtener la aprobación, por su parte la fundación y sus patrocinantes tienen la misión de hacerlos viables.

Sobre este tema se abre un interesante escenario, llegar a más escuelas que necesitan apoyo donde los niños y maestros lo necesitan y son ampliamente receptivos para así lograr en todas las comunidades donde puedan actuar alcanzar un gran impacto social. Por el efecto multiplicador que genera teatro escolar, se pueden realizar talleres a los padres y otras iniciativas a favor de las familias, propone Albita

Esta importante Fundación ha ejecutado sus primeros proyectos en escuelas y comunidades de Caracas y el Estado Miranda. La finalidad es que en este año y en los próximos pueda ampliarse la actividad, alcanzar mayor financiamiento y ejecutar un programa en las comunidades más importantes del país. 

Para ubicarlos, escribir a la Fundación Espíritu en Movimiento a través del correo:

teateatro.v@gmail.com

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